Prensa Libre.-

El presidente Otto Pérez Molina, en su primer discurso en la ONU, sugirió la integración de un grupo de países que impulsen el tema en ese organismo mundial. El gobernante mexicano, Felipe Calderón, exigió que las Naciones Unidas encabece la discusión del asunto, y Juan Manuel Santos, de Colombia, pidió un diálogo “franco” y “global”.

Pérez Molina invitó a los jefes de Estado para que se revise la Convención Única sobre Estupefacientes, vigente desde 1961, a fin de actualizarla en cuanto a la clasificación de las drogas, su grado de adicción y sus efectos.

Plantea constituir grupo

Para asegurar que prospere el planteamiento, el mandatario guatemalteco también sugirió un mecanismo diplomático.

“Guatemala desea proponer un grupo internacional de países amigos de la reforma a la política global de drogas, que reúna a aquellos gobiernos interesados en promover en los foros multilaterales apropiados una evaluación objetiva y rigurosa de nuestra política actual, así como considerar nuevas alternativas creativas”, añadió.

Calderón señaló: “Propongo formalmente que la ONU se comprometa en el tema, que haga una valoración profunda de los alcances y de los límites del actual enfoque prohibicionista en materia de drogas”, y aclaró: “Eso no implica que se deba bajar la guardia. No vamos a ceder ni un milímetro a las organizaciones criminales”.

“Así como se ocupa —la ONU— de las hambrunas, de problemas de salud y el cambio climático, es hora también de entrar en acción para detener esta ola de muertes”, dijo Calderón, quien recordó que EE. UU. es el mayor consumidor de drogas en el mundo, por lo que pidió a ese país acciones para detener los “flujos de dinero” que alimentan al crimen.

Santos puso como ejemplo los estudios que encabeza la Organización de Estados Americanos (OEA) por mandato de los países del continente.

“Es el comienzo de una discusión que el mundo ha evadido por muchos años y que esperamos produzca resultados concretos. El diálogo de las drogas, que tanto daño le han hecho al mundo, debe ser franco y debe ser global”, resaltó.

En vista de la coincidencia en los puntos, Pérez Molina dijo que los cancilleres de los tres países podrían trabajar en una declaración conjunta que formalice la posición de esas naciones.

Grupo especial

Funcionarios y diplomáticos guatemaltecos aseguran que México y Colombia formarán parte del grupo de países amigos que propuso Pérez Molina.

También podrían estar abiertos al diálogo Costa Rica, Panamá, España y Portugal, según el gobernante y Fernando Carrera, secretario de Planificación de la Presidencia.

Gert Rosenthal, embajador permanente de Guatemala en la ONU, explicó que el primer paso es hablar con países amigos, para luego llevar el tema a un “seno multilateral” de la ONU.

Pérez Molina reconoció que durante su administración de cuatro años no será posible ver algo concluido.

Carrera recordó: “Cuando hablamos de procesos largos, hablamos de cinco, 10 o hasta 15 años, pero lo más importante es que al introducirse el debate empieza a haber una revisión de qué estamos haciendo y por qué lo hacemos”.