fatima ammarEl Sol.-

Fátima Olivares (foto), la representante de la organización que nuclea a las trabajadoras sexuales en Mendoza, confirmó que en la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza no aceptaron modificar la ordenanza aprobada en diciembre, por la que se clausuran los locales en los que hay oferta de comercio sexual. El Gobierno municipal avanzó en noviembre con una medida que tiene como objetivo clausurar y no ordenar nuevas habilitaciones a los cabarets, lugares de alterne, casas y departamentos en los que hay meretrices y hasta los residenciales y hospedajes en los que se favorece la prostitución.

Los funcionarios capitalinos precisaron que la intención era combatir los sitios en los que se puede facilitar la acción de quienes se dedican a la trata de personas y extinguir el proxenetismo, pero que la idea no era perjudicar a las mujeres que sin ninguna intermediación se dedican a la prostitución. Ante la noticia de la ordenanza, que fue aprobada por el Concejo Deliberante de Capital, la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina (Ammar) salió a protestar por lo que considera una afectación a su fuente de trabajo.

De todas formas, la Ammar acompaña la lucha contra la trata de personas y combate el proxenetismo, ya que desde esta organización entienden que el trabajo sexual se puede ejercer de manera autogestionada, en la cual, las mujeres que se dedican a la prostitución se organizan como en cooperativas. De este modo, indican que no hay posibilidades que trabajen mujeres forzadas o engañadas, y no permiten tampoco que lo hagan las menores de edad.

Olivares solicitó una audiencia con las autoridades de Capital, quienes la recibieron hace casi dos semanas, ya que debía mantener este contacto oficial antes de que entrara en vigencia la ordenanza, lo que tenía que ocurrir a mitad de este mes. La referente de Ammar en Mendoza admitió que la ordenanza no va a ser modificada, y que su acción quedó limitada a presentar un petitorio para que se contemple el no cierre de los lugares en los que las prostitutas demuestren que no tienen a alguien que las maneje, o sea un proxeneta.

De todas formas, desde esta organización reiteraron que seguirán peleando por defender su actividad, y tienen fe en que en Mendoza se avance con una ley que regule el trabajo sexual, algo que está en análisis por el lado de un par de legisladoras provinciales oficialistas como son Lorena Saponara y María Evangelina Godoy. Ellas son autoras de uno de los proyectos que se unificaron en una sola iniciativa y que apunta a combatir la trata de personas en Mendoza, pero, a la vez, las diputadas están elaborando lo que podría llegar a ser una norma que regularice el trabajo sexual en la provincia.

Saponara ha comentado en varias ocasiones que hay que combatir la trata de persona con toda el peso de la ley, pero que darle un marco legal a la actividad de las meretrices también servirá para blanquear esta actividad, lo que indirectamente, al fijarle una regulación, también impediría que quienes delinquen con el tráfico de mujeres o someten a menores agiganten sus redes comerciales.