AFP.-

Un juez federal en Estados Unidos negó el martes la libertad bajo fianza de la mexicana Sandra Ávila Beltrán, conocida como “La Reina del Pacífico”, acusada en una corte de Florida de narcotráfico.

Avila Beltrán, de 51 años de edad, quien fuera una figura prominente del cartel de Sinaloa, está acusada de conspirar para importar a Estados Unidos hasta cinco kilogramos de una sustancia controlada con cocaína entre 1999 y 2004 y de intentar distribuir esa misma cantidad de cocaína durante el mismo periodo.

La acusada compareció con uniforme de presa y esposada en una audiencia de 20 minutos ante el juez de la Corte Federal de Miami, Patrick White, quien negó el pedido de libertad condicional que buscaba su abogado, porque aunque no la considera un peligro para la sociedad, dijo que sí existe riesgo de fuga del país.

La fiscal federal Cinthya Wood pidió al juez que se mantuviera a Avila Beltrán detenida sin derecho a fianza mientras se decide el juicio en su contra, porque al no tener vínculos familiares y de ningún tipo en Estados Unidos, ésta podía escapar del país.

El juez fijó una audiencia para el próximo 14 de septiembre. Según su abogado, Stephen Ralls, la acusada más adelante se declarará no culpable de los delitos que le imputa la fiscalía estadounidense.

Esta fue la segunda comparecencia de Sandra Ávila ante la corte de Florida, luego de que el pasado 9 de agosto fuera entregada en extradición al gobierno de Estados Unidos tras permanecer presa en México por narcotráfico.

La “Reina del Pacífico” cobró fama cuando al ser detenida en septiembre de 2007 posó con una retadora sonrisa frente a las cámaras, inspirando libros que develaron algunos detalles de la cultura “narco”.

Ávila, de grandes ojos negros, es conocida como la Reina del Pacífico por un “narcocorrido” hecho en su honor antes de la detención. Este género musical narra hazañas de narcotraficantes, sus aventuras, amores y enfrentamientos con policías y militares.

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En enero, los abogados de Ávila consiguieron un amparo para que no fuera extraditada a Estados Unidos, por considerar que los delitos por los que era requerida ya habían sido objeto de un proceso judicial en México.

El tratado entre México y Estados Unidos establece que no se puede conceder la extradición si ya hubo sentencia en el otro país sobre los delitos por los que es requerida la persona.

Poco después de su arresto, fue detenido el novio de “La Reina del Pacífico”, un colombiano acusado de narcotráfico, Juan de Dios Espinosa, alias “El Tigre”, considerado un importante vínculo entre cárteles de Colombia y México.

Juan de Dios Espinosa fue extraditado a Estados Unidos en diciembre de 2008 junto con otros nueve narcotraficantes detenidos en México.