s_100065_6875_cromagnon_1r“La lluvia es también no verte”, que acaba de estrenarse, expone el debate sobre culpabilidades y responsabilidades desde la voz de sobrevivientes y familiares de la tragedia de Cromañón. “La pregunta que la recorre es ¿qué es la justicia? ¿es solamente una institución o es algo más grande?”, dijo a Infojus Noticias Mayra Bottero, directora del documental.

Julia Muriel Dominzain – Infojus Noticias.-

Lonas calientes que abrazan cuerpos, sobrevivientes que narran agonías, velas que se prenden cada 30 de diciembre, zapatillas acumuladas sobre una calle en Once clausurada desde hace más de diez años, graphs de noticieros que repiten prejuicios, músicos cuestionados, cadenas de impunidad, víctimas transformadas en victimarios y padres y madres que se convierten en actores políticos: en el documental “La lluvia es también no verte” se discute todo. La película sobre Cromañón, que acaba de estrenarse, expone el debate sobre culpabilidades y responsabilidades desde la voz de sobrevivientes y familiares. “La pregunta que la recorre es ¿qué es la justicia? ¿es solamente una institución o es algo más grande?”, dijo aInfojus Noticias Mayra Bottero, directora del documental.

El objetivo fue retratar los 10 años de batallas judiciales que llevaron adelante familiares y sobrevivientes. “En los relatos se reconstruye qué pasó esa noche del 30 de diciembre de 2004”, contó Bottero. En la catástrofe evitable del recital de Callejeros murieron 194 personas y otras 1500 resultaron heridas.

La directora empezó a registrar imágenes en 2005, cuando arrancó la carrera de Imagen y Sonido en la Universidad de Buenos Aires. Iba a las marchas porque su amigo Federico González había muerto en Cromañón. De a poco, lo audiovisual se convertía en su lenguaje. Fue instintivo: “No tenía las herramientas pero iba a las movilizaciones y ponía el foco en las víctimas”. En una década, el proyecto fue mutando. Dejó de filmar después de la primera sentencia porque “el proceso judicial marcó el ritmo emocional de la historia”.

Durante esos años conoció a su pareja, Santiago, sobreviviente de la catástrofe más grande que recuerde la Ciudad de Buenos Aires y hermano de una víctima mortal. Fue la mamá de él la que, en 2012, le mostró que tenía guardado en VHS todo lo que había salido en la televisión desde 2004. En ese momento Bottero volvió a grabar.

Las víctimas culpabilizadas

No hay entrevistas a los imputados, sólo aparecen en imágenes de archivo porque el documental pone los reflectores sobre ‘personas comunes que se convirtieron en actores políticos’. En el trailer se escucha a una mamá: “Para mí fue un mensaje de que me levantara de la cama, de que luchara con valor y alegría: así lo hice”. Y a un papá que dice que, en Argentina, la Justicia no es un servicio, es el resultado de una pelea.

“Desde la cobertura mediática se compadecían de las víctimas pero, al mismo tiempo, se las señalaba como culpables”, dijo Bottero. El mito de las guarderías que funcionaban en el baño, el cuestionamiento a los padres por “no cuidar a sus hijos”, el hincapié en quién tiró la bengala y la discusión sobre cuánto operó y a quién se le carga la cuenta de ‘la cultura del rock’. “Creo que es un mecanismo de defensa, un procedimiento para alejarnos de las víctimas y protegernos, pero en ese prejuicio desatendemos las otras responsabilidades: la autoridad, el Estado, los funcionarios policiales”, opinó.

El documental se había proyectado en noviembre de 2014 en el Colegio Público de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires y se estrenó este jueves en el Centro Cultural Konex. Ya está en cartel en el Artecinema y, desde el lunes, estará en el Gaumont. Este fin de semana se podrá ver en Córdoba: el sábado a las 17.30 en el Teatro La Luna y el domingo en la sala de Villa María.

La causa

Durante el juicio fueron imputados los músicos de Callejeros, el ex manager Diego Argañaraz, los funcionarios de la Ciudad Fabiana Fiszbin, Gustavo Torres y Ana María Fernández, Omar Chabán -que murió el año pasado- y el encargado del local Raúl Villarreal. El 16 de junio la fiscalía ante la Cámara Federal de Casación Penal y las querellas pidieron que se confirmen las condenas impuestas a los músicos, los ex funcionarios del gobierno porteño y Villarreal. Las defensas solicitaron la absolución de los condenados.

Los imputados habían sido absueltos en el juicio oral y condenados por la sala III de Casación. En agosto del año pasado la Corte Suprema ordenó que se dicte una nueva resolución. En ese momento recuperaron la libertad Patricio “Pato” Fontanet y el resto de los integrantes del grupo, Villarreal, Fiszbin, Torres y Fernández.