Empalóasumujer02230223.com.ar.-

“El cuerpo era un libro de medicina legal por las lesiones que tenía”. Así, el profesional que realizó la autopsia de Nadia Vanesa Chaumont graficó el estado en que encontró el cadáver. Esa descripción fue el resumen más crudo que escucharon los integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal 3, mientras Daniel Colman, el autor del brutal asesinato, se mantenía inmutable detrás de su defensor.

El “Chavo” está acusado de matar por empalamiento a su mujer en la casa de un amigo en Santa Clara del Mar, lugar de residencia de la pareja. En su lineamiento inicial, el fiscal Rodolfo Moure calificó al hecho como homicidio agravado por alevosía y el vínculo., mientras que el defensor Alejandro Borawsky adelantó que planteará “circunstancias extraordinarias de atenuación”.

Los jueces Eduardo Alemano, Fabián Riquert y Juan Manuel Sueyro también juzgan a Alfredo López, el dueño de la casa ubicada en Siguantanejo 126 donde sucedieron los hechos. Para Moure, el accionar de López –que llegó al juicio en libertad y es asesorado por el defensor oficial Eduardo Carmona- se enmarca en la figura de encubrimiento agravado y omisión de ayuda.

Nadia “Colo” Chaumont y Colman integraban una pareja atravesada por el alcohol, los golpes y el descuido de sus tres hijos. Los testimonios de los vecinos escuchados en las dos primeras audiencias dan fe de ello y avalan la idea de que era una familia cruzada por la violencia de género.

Los hechos

La noche del 1 de junio de 2013, López, la “Colo” y el “Chavo” junto a los hijos de la pareja estaban comiendo en la casa del primero de ellos. Según declaró un vecino este martes, al regresar a las once de la noche los observó comiendo y tomando en el fondo de la vivienda.

De acuerdo a la investigación previa –confirmada por López en su declaración- Colman llevó a sus hijos a la casa para que se acostaran. Cuando regresó minutos después, observó que Chaumont y López se estaban besando, por lo que atacó a su vecino, lo golpeó en el rostro y sacó a su mujer al patio de la vivienda. El dueño de casa declaró que cerró la puerta con llave para que no pudieran ingresar.

A partir de ese momento, la mujer sufrió una serie de tormentos que finalizaron con su muerte. El médico que practicó la autopsia detectó “lesiones sucesivas en un lapso grande de tiempo, desde esquimosis a laceraciones, pasando por hematomas o contusiones”. Si bien no pudo definir a la secuencia como una tortura, afirmó que previo al empalamiento hubo un “castigo muy duro”.

En su testimonial, López aclaró que abrió la puerta porque Colman gritaba que la “Colo” se moría. Antes de que la policía llegara tras el llamado de un vecino, apoyaron el cuerpo en la cama y limpiaron algunas de las manchas de sangre que había en el lugar. Aunque en un primer momento ambos quedaron detenidos, el dueño de casa fue excarcelado y es juzgado por el delito de encubrimiento y omisión.

Aunque no hay dudas acerca de la materialidad y la autoría del hecho, este miércoles tendrá lugar uno de los momentos centrales del debate. Ante el Tribunal, el fiscal, los defensores, un par de familiares y dos policías Colman va a dar su versión de lo sucedido.

Foto: 0223