– Te lo mereces, por sucia.

Un policía que patrullaba el parque 9 de Julio de Tucumán se bajó del móvil y caminó hacia ella. En una mano tenía el gas pimienta, en la otra el látigo. Esa tarde Noemí paseaba por el parque como todos los días. El agente le roció la cara, le gritó y ella corrió. Cuando él la alcanzó, le dió dos latigazos en la espalda. Una mujer que estaba en el parque filmó la escena que dura menos de dos minutos y el video se viralizó.

Anoche, luego de que trascendiera en los medios locales, la fiscalía de Tucumán tomó el caso y ordenó que se identificara al policía del látigo. La versión oficial dice que junto al policía estaba presente una agente mujer -aunque en el video no se ve- para restarle gravedad al caso. El informe no dice nada del látigo.

El secretario de Seguriad de Tucuman, Paul Hofer, habló de un “exceso por parte del policía” y dijo que van a “seguir trabajando para que estas situaciones no ocurran”. Ya iniciaron un sumario para investigar el caso. La secretaria de Derechos Humanos de la Provincia, Érica Brunotto, repudió el accionar del agente, le pidió a Hofer un informe de las armas que usa la Fuerza y de los protocolos de actuación, y solicitó que se aparte al policía del cargo. La policía de Tucumán no está autorizada a usar látigos.

La organización Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLa) fue la primera en expresarse por el caso. “¿Qué nos espera si la Policía da latigazos a una mujer en la vía pública a los ojos de todos?”, publicaron en un comunicado. Mañana se reunirán con Brunotto. Presentarán un escrito y pedirán que el informe pedido al secretario de Seguridad se haga público. “Lo principal es denunciar que esta situación es una grave violación a los derechos humanos”, contó a Cosecha Roja Yanina Muñoz, referente de MuMaLa Tucumán.

Noemí tiene 39 años y sufre una enfermedad mental. A partir de la viralización del video, el abogado Carlos Garmendia presentó una denuncia por apremios ilegales y lesiones ante la justicia. Las dos presentaciones las hizo bajo el marco de violencia de género.