Radio Fórmula.-

Los medios firmantes del Acuerdo para la Cobertura Informativa de la Violencia condenaron enérgicamente los hechos violentos al periódico El Mañana, así como al diario El Norte, del Grupo Reforma, además manifestaron su solidaridad.

Las instalaciones de dos periódicos del norte del país fueron atacadas por desconocidos este martes. A las oficinas de “La Silla”, suplemento del periódico El Norte, fue lanzada una granada de fragmentación cerca de las 4:30 horas de la mañana. La explosión causó daños en uno de los vitrales del edificio, ubicado al sur de la ciudad de Monterrey, Nuevo León.

A su vez, a las 6:19 de la mañana, en el centro de la ciudad de Nuevo Laredo, Tamaulipas, un artefacto explosivo estalló en la pared de la fachada del edificio del diario El Mañana, a unos metros de la entrada principal, sin que se reporten daños de consideración.

Por la tarde, alrededor de las 16:00 horas, la oficina de la sucursal Linda Vista de El Norte, en el municipio metropolitano de Guadalupe, al norte de Monterrey, fue atacada con una granada y con armas de grueso calibre.

La fachada de las oficinas presenta al menos tres orificios por arma de fuego en las ventanas de la parte alta del inmueble. Como se informa en un comunicado, en ninguno de los tres incidentes se registraron personas lesionadas.

El diario El Mañana enfrenta esta nueva agresión a sólo dos meses del ataque que le llevó a tomar la decisión de abstenerse de publicar información relacionada con el crimen organizado. Con los dos ataques registrados hoy contra El Norte, suman cinco los atentados con características similares en su contra en menos de dos años.

“Los medios firmantes del Acuerdo para la Cobertura Informativa de la Violencia condenamos enérgicamente estos hechos y manifestamos nuestra solidaridad al periódico El Mañana, así como al diario El Norte, del Grupo Reforma”, destacan en un comunicado.

La comisión de estos atentados, dicen, precedidos por otros de la misma naturaleza en un periodo tan corto de tiempo, es prueba fehaciente de que el Estado ha claudicado en brindar garantías de seguridad para la prensa, al amparo de un sistema de justicia inoperante.

“Exigimos que estos hechos sean investigados y los responsables castigados. Es el único camino para poner fin a esta ola de violencia en contra de medios y periodistas Los medios de comunicación rechazamos las acciones que buscan intimidar, silenciar o imponernos una agenda que no sea la del interés público. Demandamos al Estado, en sus tres niveles de gobierno, restablecer de manera urgente las condiciones necesarias para desarrollar nuestra labor informativa”, concluyen.