Un oficial de la comisaría 52 amenazó a Jonathan “Kiki” Lezcano un día antes de que lo mataran de un balazo en Villa 20. “Desde ahora voy a ser tu sombra”, le dijo. Cuando Kiki desapareció, la familia lo buscó durante dos meses y lo encontró enterrado como NN. Un año después confirmó la sospecha de que a Kiki y a su amigo Ezequiel Blanco los mató la policía: en un video se los ve agonizar y se escuchan las burlas de varios agentes. Al acusado del crimen -Santiago Daniel Veyga- lo sobreseyeron dos veces pero la familia apeló y logró que llegue a juicio. Hoy la justicia lo volvió a absolver.

En las tres audiencias, quedó comprobado que los disparos efectuados por el ex policía Veyga fueron “a matar”, según la declaración del perito oficial que realizó la autopsia de Kiki y Ezequiel. Ayer, durante la tercera jornada, declararon los últimos testigos y el tribunal anunció que hoy serían los alegatos y la sentencia. “Tener justicia no es un privilegio, sino un derecho. Contamos con que estos jueces puedan sentir cómo late el corazón de una madre que pide justicia”, dijo Angélica antes de saber el veredicto.

***

Cuando el 8 de julio de 2009 Kiki no volvió a la casa, su mamá Angélica se puso la búsqueda al hombro. Hizo denuncias, recorrió los pasillos de Villa 20, caminó, golpeó puertas de juzgados y organizó marchas. Nadie sabía nada de Kiki. Hasta que un mes y medio después un sobrino se animó:

– Tía, te tengo que decir algo: los policías de la Comisaría 52 amenazaron a Kiki un día antes de desaparecer.

Dos meses después del último día que lo vieron, el Juzgado 49 a cargo de Fernando Cubas le avisó a Angélica que su hijo estaba enterrado en Chacarita. Lo habían matado arriba de un auto en un pasillo de la villa junto a su amigo de 25 años, Ezequiel Blanco.

Al oficial lo sobreseyeron en base a su propia declaración y delegaron la investigación en la misma fuerza acusada, que eliminó pruebas (la ropa desapareció) y alteró otras (le tiraron a las armas un ácido que arruinó la posibilidad de peritarlas).

La Justicia avaló durante seis años el planteo del oficial: él siempre dijo que lo le habían querido robar la camioneta y que actuó en ‘legítima defensa’. Angélica apeló. En junio de 2015 la Sala IV de la Cámara Federal de Casación Penal anuló el sobreseimiento. Los jueces Mariano Borinsky, Juan Carlos Gemignani y Gustavo Hornos coincidieron en que la resolución había sido apresurada. No estaba comprobado que Veyga haya estado en riesgo ni que los jóvenes tuvieran armas ni que -de tenerlas- estuvieran cargadas ni -menos- que hayan disparado.

Esta vez el juicio comenzó a principios de junio y tuvo tres audiencias. La policía impidió el ingreso a familiares y periodistas y hasta impidió que se realizaran actividades en la puerta de los tribunales. Mañana a las 10 habrá una conferencia de prensa y el próximo martes se conocerán los fundamentos.
Acá podés leer la historia completa.