El Tribuno.-

Efectivos de la Brigada de Investigaciones de Orán se hallan tras la pesquisa de un supuesto pacto suicida múltiple, pergeñado por un grupo de niñas, de entre 12 y 13 años, todas alumnas de la escuela Rosa Montellano de Sidorenko, a quienes se les descubrieron sospechosos cortes en los brazos.

El alerta del caso se disparó al mediodía de la víspera, cuando Antonia, una docente del séptimo grado, detectó una extraña herida, realizada con un objeto cortante, en una de las extremidades de una alumna.

La docente le preguntó a la menor por qué tenía esa cicatriz reciente, recibiendo una respuesta atroz: el deseo de quitarse la vida por falta de afecto familiar.

De inmediato y tras averiguaciones se determinó que la chica no era la única en esas condiciones y que había en el establecimiento otras tres estudiantes con cortes similares, todos practicados con trinchetas y cuchillos.

Por ello es que la directora del establecimiento, Isabel Caro, quien ordenó que se realizara el control, que dio tales resultados, avisó al Servicio de Emergencias 911 cuyos efectivos se trasladaron hasta el establecimiento en compañía de una psicóloga de apellido Cotto, determinando la profesional, de acuerdo a informaciones recabadas por El Tribuno, que todas las niñas arguyeron tener serios problemas familiares.

Dada la gravedad del caso y ante la posibilidad de la existencia de un pacto que pudiera involucrar a más víctimas -recordando la ola de suicidios juveniles producida en 2010, en Rosario de la Frontera-, tomó intervención la Brigada de Investigaciones.

El caso fue puesto en antecedentes de la supervisora de núcleo, Diana Valdez, quien hizo labrar actas de todas las actuaciones para elevar un informe al Ministerio de Educación. “Ya tomó cartas en el asunto también la psicóloga de la escuela, quien conformará un taller interdisciplinario con los padres, alumnos y docentes para abordar el problema y buscar soluciones”, puntualizó Valdez, al ser entrevistada por El Tribuno.

Sin bien no hay que lamentar casos fatales en torno de esta situación, el problema causa preocupación en la comunidad educativa de la ciudad norteña. Por ello mismo es que las autoridades policiales han decidido seguir de cerca el tema, hasta que el peligro se considere superado, informaron fuentes vinculadas a la investigación.