A seis meses del asesinato de Regina Martínez Pérez, corresponsal de Proceso en Veracruz, la Comisión Especial Investigadora encargada de esclarecer el homicidio no ha dado resultado alguno y, ante el escenario de impunidad que se perfila en la entidad, constituye una “muestra más de la suerte que corren los casos de periodistas en México”, denunció Darío Ramírez, director ejecutivo de Article 19 para México y Centroamérica.

“No nos extraña. Nos duele, indigna y preocupa, pero al final ha sido el modus operandi de las diferentes autoridades que han manoseado este caso, en los diferentes órdenes de gobierno; creo que el caso de Regina Martínez está corriendo la misma suerte de los otros colegas que han sido asesinados”, expresó aNotimex.

“Desde la perspectiva de las autoridades locales me parece que están cumpliendo en la predicción de que este caso no iba a ser resuelto de una manera diligente como lo aseguró al crear esa comisión el gobernador Javier Duarte (…) el dicho se corrobora en que si quieres que nada pase, crea una comisión”, acusó.

En entrevista, Darío Ramírez consideró que en los nueve homicidios de comunicadores ocurridos en Veracruz, tan sólo durante la administración de Duarte de Ochoa, las autoridades se han desentendido de líneas de investigación que vinculen los crímenes con el trabajo periodístico de las víctimas.

“Lo que han hecho los diferentes procuradores o autoridades es borrar del imaginario la posibilidad de que esté relacionado con su trabajo, porque así ellos creen que cae dentro de un asesinato más en la entidad”, alertó.

Al asesinato de Regina Martínez, recordó, se le ha querido dar el perfil de “un crimen pasional”, o bien que fue “víctima de la delincuencia común”.

Es por ello que el director ejecutivo de Article 19 para México y Centroamérica consideró necesaria la puesta en marcha de protocolos de investigación que “pongan en el centro” la hipótesis de que la agresión estuvo relacionada con el ejercicio de la libertad de expresión.

Estos protocolos, resaltó, han sido propuestos tanto a la Procuraduría General de la República (PGR) como a diferentes fiscalías estatales, sin embargo, deploró que “la costumbre es tomar la línea de investigación más sencilla, ya sea la pasional, la vida privada o la delincuencia común”.

Balbina Flores, representante en México de Reporteros Sin Fronteras, organización con sede en Francia, explicó que el contexto de impunidad que enfrenta Veracruz en cuanto a ataques a periodistas viene “arrastrándose” desde la administración de Fidel Herrera.

La activista recordó que durante el periodo de Herrera Beltrán  ocurrieron al menos cuatro asesinatos de periodistas, además de registrarse la primera desaparición de un trabajador de medios de comunicación en el estado, y todos estos casos –lamentó– están marcados por el común denominador de la impunidad.

“Esto se debe a que hay un contexto de impunidad que se viene arrastrando en Veracruz y en todo el país, entonces en la medida que no se investigue y se sancione a los responsables de estos asesinatos, desapariciones y agresiones a periodistas, seguirán ocurriendo, pues no hay una sanción ejemplar que indique que esos hechos ya no deben seguir ocurriendo”, dijo.

También advirtió que la violencia que se ha ejercido en contra del gremio periodístico en los últimos dos años en Veracruz ha provocado un fenómeno que no se había observado en ninguna entidad en el país: el desplazamiento de reporteros.

“Esta situación del desplazamiento de periodistas nosotros no lo habíamos observado en ningún otro estado del país, ni aun en los momentos más violentos como ocurrió en la década de los ochenta en Baja California, cuando el cártel de los Arellano Félix atentó contra la vida de Jesús Blancornelas y después mató a Francisco Ortiz Franco”, refirió.

Manifestó que cifras de Reporteros Sin Fronteras dan cuenta del “exilio” de entre 18 y 20 reporteros veracruzanos que han llegado a radicar a la Ciudad de México, sin embargo, consideró que el fenómeno de desplazamiento se extiende a otras entidades de la República.

En la actualidad, añadió, “la situación del ejercicio periodístico en la entidad” tiene grandes limitaciones, como la autocesnsura, además del temor de los reporteros que se han quedado, ya que realizan su trabajo “no en las mejores condiciones de seguridad y tranquilidad”.

Al respecto, Darío Ramírez, director de Article 19, puntualizó que la entidad veracruzana no sólo es el lugar “más peligroso” en México para el trabajo periodístico, sino de toda América Latina, junto con un país completo que es Honduras.

“Veracruz ocupa el primer lugar desafortunadamente por mucho, y eso no es una interpretación de ninguna organización de defensa de la libertad de expresión; los datos que tanto les gustan a las autoridades presumir en muchos ámbitos son contundentes”, acotó.