La jornada.-
Casi la mitad de la policía municipal de Ayotlán, municipio de la región Ciénega de Jalisco, ha renunciado entre el lunes y martes, luego de la muerte de cuatro policías durante un ataque a la presidencia el domingo pasado.
La dirección de Seguridad Pública de Ayotlán informó que 32 de los 68 policías que integraban la corporación, presentaron su baja desde el lunes.
El 47 por ciento de la policía, decidió renunciar “por temor”, declaró un mando de la dependencia. El domingo pasado, la alcaldía y la comandancia policial fueron atacadas por sujetos armados durante la madrugada. Ahí, perdieron la vida tres uniformados. Por la noche de ese mismo día, un segundo ataque se suscitó, lo que ocasión la muerte de otro gendarme.
Hoy, en el turno vespertino nada más 15 policías acudieron a trabajar mientras que por la mañana, ninguno de los 21 uniformados que debían presentarse, acudieron a laborar.
“Desde el domingo vino el Ejército y no habíamos podido salir. Está gacho el asunto, hay mucho personal de Sedena”, dijo un alto mando de la policía municipal. En Pihuamo, en el sureste de la entidad, las autoridades municipales y estatales, rechazaron la versión de que el martes por la noche, unas 18 personas habían muerto a raíz de un presunto enfrentamiento entre personal de la Marina y miembros del crimen organizado.
Genaro Pacheco, vocero de la Policía estatal, aseguró que no había información oficial al respecto; lo mismo informó el Servicio Médico Forense, que descartó la presencia de 18 cadáveres en la zona.
En su página electrónica, el diario regional El Guardián, reportó que los supuestos enfrentamientos había dejado un número de entre 15 y 20 personas fallecidas.
Entrevistado vía telefónica, al alcalde de Pihuamo, Everardo Contreras López, negó también las versiones de los enfrentamientos. Aludió solo a los hechos del domingo anterior, cuando cuatro policías fueron levantados y posteriormente, asesinados. “Estamos pasándola con dificultades. Tuvimos la pérdida de cuatro policías, no fue un enfrentamiento, más bien fue un acto de cobardía. Nosotros nos encontrábamos en las fiestas patronales el domingo pasado, ahí en Los Naranjos, llegó gente armada en vehículos, camuflados como si fueran de la Marina, y se llevaron a los policías”, dijo el edil. Contreras López detalló que desde el domingo, unos 40 soldados patrullan el municipio, que cuenta con apenas 18 policías para una población de 12 mil 119 personas.
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