VIOLENCIAINSTITUCIONALSANTAFEEl Ciudadano.-

El defensor General de la provincia, Gabriel Ganón, presentó ayer  una denuncia por un caso de violencia en el que apuntó a policías de la Unidad Regional II como posibles responsables. De acuerdo con su presentación, la víctima es un vendedor ambulante que orinaba en la calle y terminó denunciado por una vecina por exhibición obscena. Y fue a parar a la comisaría 15ª, donde compartió la celda con dos detenidos y terminó internado en estado grave a las pocas horas. Según lo que dijeron los responsables de la seccional a los familiares de la víctima, los agresores fueron dos muchachos que pasaron la noche en el calabozo junto a él; sin embargo estas personas fueron liberadas y hasta ayer no habían sido arrestadas. El estado de salud del hombre agredido es muy delicado.

Todos lo conocen como Patón, pero se llama Roberto Emilio Martelón y tiene 56 años.

Tuvo un kiosco durante un tiempo frente a la plaza Sarmiento pero ya llevaba más de una década como vendedor ambulante y técnico de fútbol. Es hincha fanático de Newell´s Old Boys y personaje ilustre de la zona sur, ya que recorre los comercios de calle San Martín ofreciendo prendas que compra en calle San Luis. “Todos lo conocen, es muy querido. Siempre laburando”, contó su hermano Osvaldo, mientras esperaba el parte médico en el Heca.

Patón está internado por un problema que arrancó el sábado a la madrugada. Según la denuncia presentada por Ganón ante la Fiscalía patrocinando a los familiares del hombre, el viernes pasado, en medio de su recorrido de ventas, a eso de las 0.30, Roberto paró en un bar de Juan Canals y San Martín para tomar unas copas con los habitué del lugar.

Estuvo un rato y decidió seguir con su caminata, para intentar hacer unos pesos más.

Como le dieron ganas de orinar, se acomodó de frente a un árbol. De acuerdo a lo que le contaron empleados de la URII a sus familiares, mientras Roberto hacía sus necesidades pasó una vecina y tuvieron una discusión. La mujer se fue espantada e hizo una denuncia al 911, acusando al vendedor de mostrarle sus partes íntimas a ella y a su pequeña hija.

El hombre siguió su camino, sin tener la menor idea de lo que le esperaba.

Según la versión policial, el hombre fue arrestado unos minutos después en la estación de servicios YPF de San Martín y Uriburu, mientras charlaba con los playeros. Lo llevaron a la comisaría 15ª de barrio Tiro Suizo, donde quedó preso por exhibicionismo obsceno, algo que sólo representa una falta. Antes de ser ingresado a la celda, Patón fue revisado por un médico, que determinó que el hombre sólo presentaba un raspón a la altura de la ceja. Eran aproximadamente las 2 de la mañana.

A eso de las 6, cuando llegó a la seccional de Sarmiento al 4300 la información de que el vendedor ambulante no tenía antecedentes, los guardias que estaban a cargo del lugar lo fueron a despertar, pero no lograron que se incorpore. En un supuesto acto de piedad los policías lo dejaron dormir un rato más. Una hora más tarde volvieron a intentarlo y, ante la falta de respuestas de Patón, los uniformados lo revisaron y se dieron cuenta de que Roberto tenía un hilo de sangre en la boca.

Según la denuncia presentada por Ganón, la víctima fue retirada de la seccional por un móvil del Sies que la trasladó a 3 centros de salud. “Lo levantaron y lo llevaron al Roque Sáenz Peña, pero no lo bajaron porque no había cama. Según la Policía después lo llevaron al Hospital Provincial, pero como no pudieron hacerle una tomografía –el hospital no cuenta con tomógrafo– lo mandaron al Heca”, explicó Patricia, su cuñada.

De acuerdo al parte médico expuesto en el hospital de Pellegrini y Vera Mujica, Patón presentaba un derrame de sangre que le tomó la mitad del cerebro, agua en un pulmón y aire en el otro, y una prótesis dental partida a la mitad. Hasta ayer por la noche estaba internado en terapia intensiva y su cuadro clínico era crítico.

Los familiares de Patón se enteraron de lo que había ocurrido recién el domingo al mediodía, cuando la hija de una vecina lo reconoció y los llamó para avisarles. Los policías de la 15ª recién se presentaron a hablar con ellos el domingo por la noche, casi dos días después de que arrancaran los problemas del vendedor ambulante.

¿Qué pasó en la 15ª?

Cuando los uniformados de la comisaría de Tiro Suizo se comunicaron con los familiares de Roberto, les dijeron que no tenían claro qué fue lo que le ocurrió a Patón. Ellos inculparon a dos muchachos que fueron detenidos la misma noche y alojados junto al él. Sin embargo, aseguraron que durante el tiempo que los 3 estuvieron presos no se escucharon gritos, ni ruidos que les hicieran suponer que podía haber un problema en el lugar.

Estos dos supuestos agresores fueron puestos en libertad durante la mañana del sábado y, hasta ayer por la noche no se conocían datos sobre ellos.

¿Lo sacaron a pasear?

Otro de los temas sustanciales a definir para entender lo que pasó con Patón es su recorrido por los hospitales. De acuerdo con la denuncia presentada por Ganón, el hombre fue retirado a las 7 de la mañana del sábado de la seccional 15ª y su ingreso al Heca quedó registrado a las 15, es decir 8 horas después. “Queremos saber qué paso.

Por qué si lo sacan a las 7 de la mañana de la comisaría llegó a las 3 de la tarde al Heca. El subcomisario Juan Pablo Bagli nos dijo que los trasladó el Sies, pero ¿todas esas horas dónde estuvo?, ¿estaban esperando que se muriera?”, denunció Patricia, la cuñada de Patón.

Esta versión contrasta con la que dieron los policías implicados, al ser entrevistados por los fiscales. Ellos aseguran que el hombre salió de la comisaría a las 16 del sábado; algo que contrasta con los dichos de familiares y allegados, quienes aseguraron que el hombre entró una hora antes al Heca.

Por el momento el caso se encuentra en su etapa inicial y son pocas las precisiones.

La investigación quedó a cargo del fiscal de Homicidios Dolosos Ademar Bianchini.