angelesrawson

Infojus Noticias.-

Después de la negativa a declarar de Jorge Mangeri, el encargado del edificio donde vivía Ángeles Rawson, el juzgado número 17 a cargo del juez Roberto Ponce sigue trabajando bajo estricto secreto de sumario, mientras espera el resultado de numerosas pericias realizadas a lo largo de una semana de investigación. Todavía falta que declaren como testigos algunos familiares de la adolescente de 16 años cuyo cuerpo fue encontrado en el predio del Ceamse, entre ellos su papá, Franklin Rawson. Los análisis de ADN en los elementos secuestrados en la investigación son claves para afirmar la hipótesis que sostiene a Mangieri como principal sospechoso.

Las muestras recogidas en el baúl del Renault Megane de Mangeri, en el sótano del edificio donde trabajaba el portero, así como las encontradas en un contenedor de basura del pasaje Voltaire, deberán cruzarse en el laboratorio con el material inicial hallado en el cuerpo de Ángeles. También con el hilo sisal que se usó para estrangularla, con el cabello que encontraron en una de sus uñas, con el uniforme escolar y la ropa interior. Esos resultados serán la prueba científica que va a  fortalecer o relativizar la declaración de Mangeri frente a la fiscal Paula Asaro.

Hasta ahora es el único detenido e imputado por la muerte de la adolescente es el encargado. Según la información difundida por la agencia DyN, en el acta de la declaración indagatoria a Mangeri figura que Ángeles habría muerto en el interior del camión recolector por politraumatismos.

Hoy hace una semana que se la vio por última vez. Desde entonces las conjeturas y los giros de la investigación no dan descanso. El lunes en que desapareció Ángeles, el portero llamó al consorcio y dio parte de enfermo por anginas. Su esposa, Diana Seattone, dijo que el jueves un “auto sin patente, un Polo negro, con dos personas” se acercó al portero. “Le pusieron un arma en la cabeza, le dijeron un montón de cosas”.

Al día siguiente Mangeri llegó a la fiscalía como testigo y quedó detenido como imputado.

Seattone dijo que su marido era un “perejil” y denunció que lo “quemaron y picanearon” antes de ir a declarar como testigo. Esto abrió una investigación interna en la Policía Federal, aunque no se inició causa judicial. Asaro al escuchar el relato de Mangeri que narraba los apremios ilegales, pidió que el portero fuera revisado por peritos médicos. Lo que escuchó Asaro después la llevó a suspender la declaración, relevarlo del juramento de decir la verdad y pedir que lo indague el juez.

El sábado a la tarde Mangeri, asesorado por su defensor oficial, Carlos Garay, decidió no declarar. Quedó detenido y ahora el juez tiene diez días para resolver su situación.

La agencia DyN también cita fuentes judiciales que afirmaron: “En principio está descartada cualquier connotación sexual en relación con el homicidio –y agregaron que hasta ahora- no hay otra prueba que lo incrimine (a Mangeri). De hecho, no hay prueba fehaciente de que Angeles haya regresado a su domicilio, más allá de la filmación en la que sólo se ven piernas que las compañeras de colegio dicen que son de ella. Faltan resultados de pericias que son decisivas para la investigación”.